En la primera de sus cinco fechas en el porteño Gran Rex, Mateo Sujatovich presentó un show distinto, íntimo y poderoso. Crónica de una noche compuesta por un muchacho con una guitarra, un piano y un puñado de canciones teledirigidas.En la primera de sus cinco fechas en el porteño Gran Rex, Mateo Sujatovich presentó un show distinto, íntimo y poderoso. Crónica de una noche compuesta por un muchacho con una guitarra, un piano y un puñado de canciones teledirigidas.
Más historias
Queensrÿche promete aportar sus hits de metal progresivo al festival Masters of Rock
Joaquín Sabina se despidió en su décimo Movistar Arena y cerró una relación de «amor apasionado» con Buenos Aires
¿Qué pasa con Pedro Pascal, que lo quieren todos? Rumores de romance con Jennifer Aniston, The Last of Us, filmes en Cannes y la saga de Avengers